lunes, 23 de junio de 2008

Colón, ciudad sin ley

23 de junio de 2008
Por HLH


Foto:EFE/Víctor Lerena

¡Aparta! ¡Aparta que lo matan!

Y tuvo que dar media vuelta en plena calle Génova para poder dejar escapar a un Smart con un pobre chaval dentro, al cual una panda de unos 20 cobardes que no llegaban ni a los 20 años estaban intentando linchar.

Colón, ciudad sin ley. Ni las calles cortadas desde Alonso Martínez, ni la Castellana, y lo que es peor: ni un solo policía en todos los alrededores. Todo dejado a merced de una jauría humana de imberbes que no serían capaces de toserle a nadie por separado pero que la valentía del grupo al estilo skin-head envalentona y convierte en unos verdaderos terroristas.

Muy mal la Delegación del Gobierno. Alguien debería pedirles responsabilidades por tal falta de previsión y por un comportamiento tan irresponsable. Ni un solo policía ni antidisturbios para controlar a varios miles de personas entre los que se escondían cientos de incontrolados con comportamiento terrorista. No era necesario ni que intervinieran, ni que abrieran la cabeza a nadie (aunque un par de cabezas abiertas a algún energúmeno de esos no habría estado mal). Simplemente que ejercieran de poder disuasorio. Pero nada, ni un solo uniformado azul.

¿Dónde estaba la Policía Nacional? Pues un poco más arriba, en Vallehermoso, estaban dos coches con los policías allí tomando el fresco y fumándose un cigarro. ¡Olé sus huevos! Y un poco más abajo el linchamiento de todo coche al que pasaba. No me extrañaría que mañana nos despertáramos con algún muerto, y si tengo que elegir prefiero que sea alguno de esos imberbes analfabetos. Pero lo que mis ojos han visto hoy en la Plaza de Colón daba verdadero miedo. No hemos estado ni 5 minutos tras llegar y comprobar lo que allí se cocía. Hasta un autobús de la EMT ha sido bloqueado con los energúmenos golpeándolo para verdadero terror de la gente que iba dentro.

El pobre Smart ha conseguido huir, olé por el chaval que tuvo los huevos de decirle al otro coche que le dejara escapar, porque si no habría temido por la vida del pobre chaval que iba dentro. Los cobardes lo han ido persiguiendo, pero ha conseguido desaparecer (o eso espero). Iba a hacer una foto, pero teniendo en cuenta lo que me pasó la última vez que hice una foto a unos energúmenos, de los que escapé de milagro, preferí guardar el móvil. Subiendo ya entre Alonso y Bilbao vimos a un grupo de chicas en un descapotable que parecían dirigirse a Colón y las hemos intentado convencer que por favor se metieran por Alonso y no entraran allí. Espero por su bien que nos hicieran caso.

Maldita delegación del Gobierno, maldito ministerio del Interior y maldito Ministro del Interior, cuya imprevisión han convertido las calles de alrededor de Colón en un campo de batalla donde los violentos campaban a sus anchas. Y maldita Cuatro, por alimentar dicha violencia. Espero que alguna de sus cabezas ruede mañana.

Yo he conseguido escapar con mi coche a través de San Bernardo. Y visto lo visto, y con todo el dolor de mi alma, prefiero que no ganemos el jueves ante Rusia. Nos irá mucho mejor a todos.

No hay comentarios :

Publicar un comentario