Las obras se desarrollarán en un tramo de 1,6 kilómetros de la M-621 a su paso por el casco urbano del municipio e incluyen el refuerzo y mejora del firme de la vía, el soterramiento de la línea eléctrica existente, la mejora del drenaje para evitar la formación de balsas de agua y la reposición de la red de saneamiento y diversas mejoras en la señalización.
Además, teniendo en cuenta que la travesía se ha convertido en zona urbana en casi su totalidad, se la dotará de aceras e iluminación al tramo de carretera denominado Calle del Molino de la Cruz, que una vez concluidas las obras se cederá al Ayuntamiento de Los Molinos. El objetivo es garantizar la seguridad de conductores y peatones.
Intersección con la M-622
Los trabajos también incluyen una serie de mejoras en la intersección con la M-622, a la que se dotará de mayor visibilidad y se ampliará su radio de giro para que pueda hacerse con seguridad y evitando que los vehículos invadan el sentido contrario al realizar esta maniobra, que actualmente está prohibida por esta falta de seguridad.
Para ello, se dotará a esta intersección de carriles centrales de giro, independizándolos de los carriles principales. Para facilitar los giros a la derecha se crearán dos carriles paralelos de aceleración y desaceleración desde la M-622 a la M-621, mientras que para solucionar los giros a la izquierda se han proyectados carriles centrales de deceleración y aceleración. Esta actuación beneficiará directamente a los vecinos de Los Molinos, cuya población se triplica en verano, pero también a los de otros municipios cercanos como Cercedilla, Collado Mediano o Guadarrama.
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