Incrementa la oferta turística y cultural
Madrid recupera hoy una de sus infraestructuras más singulares, el Faro de la Moncloa. Construido hace casi dos décadas, en 1992, con un diseño del arquitecto Salvador Pérez Arroyo, desde su mirador, a 95 metros de altura, se puede otear la ciudad por encima de sus edificaciones y disfrutar de inmejorables vistas de la Ciudad Universitaria, la Casa de Campo, el monte de El Pardo y la sierra de Guadarrama. Pero hace cinco años tuvo que se cerrado al público para adaptarse a la nueva normativa antiincendios y de accesibilidad, y ahora abre sus puertas de nuevo tras haber sido sometido a un intenso proceso de modernización que ha costado 9 meses de obras y 4,3 millones de euros con cargo al Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL). Ha supuesto la creación de 150 empleos.