La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha inaugurado la M-407, una nueva autovía de 11,6 kilómetros y dos carriles por cada sentido que conecta Fuenlabrada con Griñón en paralelo a las carreteras de Toledo (A-42) y Extremadura (A-5). Está previsto que sea utilizada a diario por 20.500 vehículos, muchos de ellos camiones procedentes de los polígonos industriales de la zona.
La nueva autovía, que ha contado con un presupuesto de 70,2 millones de euros, supone la creación de un nuevo corredor en el sur de la región que va a descargar el tráfico de vías ya saturadas y a mejorar las comunicaciones entre las poblaciones de la zona.
Las obras han consistido en prolongar la actual autovía M-407 desde Loranca, en Fuenlabrada, hasta la M-404 entre Serranillos del Valle y Griñón -casi en la provincia de Toledo-. La nueva vía formará un eje hacia el sur pasando además por Moraleja de Enmedio y Humanes, y beneficiando a los 215.000 vecinos de estos municipios.
La vía se convertirá en una alternativa para los madrileños que quieran trasladarse hacia el sur, y se convertirá en otro gran acceso a la capital, que canalizará parte del tráfico que recogen actualmente las grandes carreteras nacionales. También dará servicio a todo el suroeste de la Comunidad de Madrid y solucionará los problemas de tráfico de la M-405.
En su ejecución se han tenido que construir tres viaductos, diez pasos superiores y tres inferiores. Además, se ha reutilizado el caucho de 60.000 neumáticos usados para asfaltar la carretera, lo que también permite reducir la contaminación acústica procedente de la circulación de los coches. La carretera también dispone de una estación meteorológica para conocer en tiempo real las condiciones existentes.
El proyecto Redsur
La M-407 es una de las infraestructuras más importantes incluidas en el proyecto Redsur, la malla de 98 kilómetros de carreteras que el Gobierno regional está construyendo para descongestionar la zona sur de la Comunidad de Madrid y que beneficiará a 1,3 millones de madrileños.
Con una inversión global de 332 millones, las diez actuaciones previstas afectarán directamente a dieciséis municipios. Hata la fecha ya se han puesto en funcionamiento la variante de San Martín de la Vega y la M-419 (entre Fuenlabrada y Cubas de la Sagra), además de la propia M-407.
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