Páginas

miércoles, 24 de diciembre de 2014

Mensaje de Navidad de Ana Botella, alcaldesa de Madrid

Mensaje de Navidad de Ana Botella, alcaldesa de Madrid
Me resulta muy grato poderme dirigir a todos los vecinos de Madrid en estas fechas. Son días en los que participamos de una tradición, que forma parte de nuestro acervo cultural compartido y que también para muchos tiene un hondo significado en sus creencias y sus afectos.

Todos podemos observar que estas son unas celebraciones que, en buena medida, se viven en la ciudad, que la ciudad se transforma y adquiere una atmósfera en la que nos reconocemos más próximos.

Desde el Ayuntamiento hacemos un esfuerzo aun mayor de cercanía a los madrileños y a todos los que nos visitan, que son muchos. Queremos que todos vean en nuestra ciudad -una ciudad nuestra y de todos los españoles- un espacio de convivencia del que se puede disfrutar. Los servicios públicos, las manifestaciones culturales, el impulso a la actividad económica y comercial, que tan importante resulta, son compromisos que queremos cumplir con el mayor nivel de calidad y eficacia.

Siempre he expresado mi orgullo como alcaldesa y como madrileña por tener una ciudad que se caracteriza por su pluralidad, por su tolerancia, por su generosa apertura a todos. Esa conciencia de ser capital y referencia cívica de España acompaña a los madrileños y ha moldeado una ciudad que hoy puede contemplar su futuro con una sólida confianza.

Ese futuro, sin duda, nos traerá nuevos desafíos. Pero podemos mirar con satisfacción las pruebas que hemos conseguido superar en tiempos tan difíciles y exigentes como los que todavía estamos viviendo.

Precisamente en estos días, debemos tener muy presente el valor de la solidaridad de la que los madrileños y sus instituciones han dado y siguen ofreciendo pruebas sobradas. La solidaridad, que no es solamente una reacción ante la necesidad o las carencias, sino un valor permanente con el que se construye una sociedad más justa para todos, con mayores oportunidades y más cohesionada.

No olvido a todos aquellos que han sufrido más duramente esta profunda crisis. Soy consciente de que sus efectos todavía ensombrecen el presente de convecinos nuestros que han sufrido el desempleo, que han perdido su actividad empresarial o profesional, o que buscan un puesto de trabajo. Que encuentren las nuevas oportunidades que legítimamente reclaman, es el objetivo que debe concentrar el trabajo de todas las administraciones, cada una en su propio ámbito de actuación.

Si tenemos confianza, si perseveramos en los esfuerzos, si mantenemos el rumbo en el que ya vemos signos claros de recuperación, si -en definitiva- somos la nación que, unida, ha demostrado ser capaz de alcanzar el éxito del progreso y la convivencia, esta crisis será otra gran prueba que dejaremos atrás.

Y ahí seguirá encontrándose Madrid y sus vecinos, con el dinamismo y la ambición de futuro que han hecho de ella la gran ciudad que es. Un poco más grande en estos días en los que quiero compartir con todos los madrileños los deseos de paz y prosperidad.

Y este año especialmente como alcaldesa, os deseo una muy Feliz Navidad.

No hay comentarios :

Publicar un comentario