El viceconsejero de Familia y Asuntos Sociales, Carlos Izquierdo, ha visitado la residencia infantil Nuestra Señora de Lourdes en la finca El Romeral del municipio de Torrelodones, donde un equipo de educadores, técnicos auxiliares, psicólogos, un terapeuta ocupacional, una trabajadora social y una enfermera, entre otros, atienden a más de 40 menores que están bajo alguna medida de protección de la Comunidad de Madrid.
La Residencia forma parte de la red de centros del Gobierno regional para atender y proporcionar una vida, lo más normalizada posible, a los menores de 0 a 18 años de edad que están tutelados por la Administración o que se encuentran con alguna otra medida de protección. Además de la atención que se brinda en estas residencias, la Comunidad apuesta por la convivencia en familia. Así, el 60% de los 4.000 menores -bajo alguna medida de protección- conviven con familias madrileñas.
La Residencia Nuestra Señora de Lourdes acoge, cuida y atiende a los niños, proporcionando los medios adecuados para satisfacer sus necesidades básicas. Se realiza un proyecto individual de cada menor que incluye actuaciones en todos los ámbitos. La mayoría de los menores residen de manera temporal en la residencia para posteriormente, y tras un trabajo integral, reincorporarse a sus familias.
También se desarrolla un plan de intervención enfocado a un proyecto de autonomía, con el fin de facilitar su independencia e integración sociolaboral en la sociedad, tras su paso por el centro. Los menores cuentan con una vida normalizada que incluye desde la escolarización hasta actividades de ocio o tiempo libre, en el que interactúan con otras personas del municipio en centros culturales, bibliotecas, parques, centros escolares o centros de salud.
En nuestra región hay más de 4.000 menores con alguna medida de protección. El Gobierno regional cuenta con una red de residencias infantiles y recursos especializados con 87 centros. Dichos centros se caracterizan por la especialización de los recursos de acuerdo a las necesidades de los chicos que, por diversas circunstancias, se encuentran bajo la tutela de la Administración regional, donde se les ofrece una atención integral para su desarrollo personal y educativo.
La Residencia forma parte de la red de centros del Gobierno regional para atender y proporcionar una vida, lo más normalizada posible, a los menores de 0 a 18 años de edad que están tutelados por la Administración o que se encuentran con alguna otra medida de protección. Además de la atención que se brinda en estas residencias, la Comunidad apuesta por la convivencia en familia. Así, el 60% de los 4.000 menores -bajo alguna medida de protección- conviven con familias madrileñas.
La Residencia Nuestra Señora de Lourdes acoge, cuida y atiende a los niños, proporcionando los medios adecuados para satisfacer sus necesidades básicas. Se realiza un proyecto individual de cada menor que incluye actuaciones en todos los ámbitos. La mayoría de los menores residen de manera temporal en la residencia para posteriormente, y tras un trabajo integral, reincorporarse a sus familias.
También se desarrolla un plan de intervención enfocado a un proyecto de autonomía, con el fin de facilitar su independencia e integración sociolaboral en la sociedad, tras su paso por el centro. Los menores cuentan con una vida normalizada que incluye desde la escolarización hasta actividades de ocio o tiempo libre, en el que interactúan con otras personas del municipio en centros culturales, bibliotecas, parques, centros escolares o centros de salud.
En nuestra región hay más de 4.000 menores con alguna medida de protección. El Gobierno regional cuenta con una red de residencias infantiles y recursos especializados con 87 centros. Dichos centros se caracterizan por la especialización de los recursos de acuerdo a las necesidades de los chicos que, por diversas circunstancias, se encuentran bajo la tutela de la Administración regional, donde se les ofrece una atención integral para su desarrollo personal y educativo.
El Consejo de Gobierno ha acordado destinar 490.000 euros a abonar las cuotas de la Seguridad Social de aquellos parados que hayan decidido capitalizar el desempleo y emprender formando parte de una cooperativa o sociedad laboral o constituirse en autónomos (en caso de trabajadores con discapacidad). Las cuotas subvencionadas serán las correspondientes al periodo de prestación capitalizada. 
