Recuerdo que cuando era pequeño, y todavía existían sitios clásicos de tapeo en Madrid, mi abuelo me llevaba a una tabernita pequeña, un pasillo sito en la calle Conde de Romanones semiesquina con Tirso de Molina que ponían los mejores caracoles del mundo. A falta de esos extraordinarios caracoles, que es otro de los platos típicos de Madrid, os posteo aquí una receta de caracoles a la madrileña.
Los ingredientes son:
1 k de caracoles limpísimos por dentro y por fuera
1 cucharada de buen pimentón
150g de chorizo
150g de jamón curado
1 vaso de tomate frito casero
2 guindillas de cayena, si gusta el picante
Unas ramas de hierbabuena
1 cebolla
2 dientes de ajo
2 dos rebanadas de pan frito
1 hoja de laurel
Aceite de oliva
Sal
Lo primero que tenéis que hacer es limpiar bien los caracoles. Se les tiene en ayunas durante 2 días para luego meterlos durante 3 horas en agua con sal gorda para que suelten toda la espuma, al final aclaráis los caracoles uno a uno bajo el grifo con agua fría.
Se ponen los caracoles a cocer a fuego lento, para subir bruscamente la lumbre cuando los caracoles saquen la cabeza del caparazón. En otra cazuela poner el ajo y dorarlo en el aceite de oliva. Retirar y reservar. En esta misma cazuela poner a pochar la cebolla muy picada. A continuación el jamón y el chorizo, el pimentón y el resto de ingredientes. Rehogar cinco minutos. Añadís los caracoles. Majáis el ajo con algo de sal, el pan frito y añadir a la cazuela con un poco de caldo de cocer los caracoles. Se les da un hervor de 10 minutos, se prueba la sal y si es necesario se rectifica. Hay que tener en cuenta que la salsa no debe de quedar ni demasiado liquida ni demasiado espesa.
Bueno, espero que os guste.