Conocemos hoy la noticia de que la mortalidad en el servicio de urgencias del hospital Severo Ochoa de Leganés ha descendido un 47% en el último año. ¿Sorprendente? ¿Qué ha pasado para que esto suceda? ¿Cuál es la causa de tan acusado descenso?
Sencillamente, la destitución del doctor Montes responsable hasta entonces de este servicio de urgencias en el citado hospital. Diversos informes indican ahora que muchas de las sedaciones practicadas por este siniestro personaje estaban contraindicadas cuando no suponían un tratamiento claramente innecesario.
Todos o casi todos conocemos lo que pasó cuando se descubrió el escándalo de las supuestas sedaciones a las que podemos llamar "incorrectas". Simancas, una vez más, pretendió utilizarlo como arma arrojadiza contra el Gobierno de Esperanza Aguirre y, tras un comienzo vacilante, optó por defender al doctor Montes de todas las acusaciones y sospechas que su actuación levantaban. Incluso, los colegas sociatas decidieron distinguirle con el premio Rosa de Madrid entre los aplausos, vítores y muestras de apoyo del público asistente a ese evento.
Ahora, los datos, las pruebas y los informes que conocemos apuntan a que las malas prácticas profesionales de este doctor son las responsables o incidieron en la muerte de pacientes a los que se administró una sedación que no estaba indicada para los casos clínicos que presentaban.
¡Vaya! El arma secreta de Simancas para reducir las listas de espera hospitalarias no va a poder ser utilizada. Así no vale, Rafa, matando no.
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