Escrito por Ana Martínez Jiménez
Seguramente, la mayoría de nosotros lo hayamos pensado ya, y seguramente lo hayamos pensado más de una vez. Ya sea cuando hemos tenido dinero suficiente o cuando, por el contrario, nos hemos visto sin todo el dinero que desearíamos o necesitábamos, hemos considerado la opción de pedir prestada cierta cantidad de dinero.

No obstante, cuando nos vemos en estas situaciones y nos decidimos a pedir un préstamo, tenemos varias opciones que barajar. Si conocemos a alguien de confianza, ya sea un familiar o un amigo, con bastante fluidez económica, podemos plantearnoslo.
Seguramente, la mayoría de nosotros lo hayamos pensado ya, y seguramente lo hayamos pensado más de una vez. Ya sea cuando hemos tenido dinero suficiente o cuando, por el contrario, nos hemos visto sin todo el dinero que desearíamos o necesitábamos, hemos considerado la opción de pedir prestada cierta cantidad de dinero.

No obstante, cuando nos vemos en estas situaciones y nos decidimos a pedir un préstamo, tenemos varias opciones que barajar. Si conocemos a alguien de confianza, ya sea un familiar o un amigo, con bastante fluidez económica, podemos plantearnoslo.