El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y el delegado de Hacienda, Juan Bravo, han presentado los presupuestos del Ayuntamiento de Madrid para 2011. Unos presupuestos que registran un descenso de más del 8% y que no comtemplan la subida de impuestos para el próximo año.
Por tercer año consecutivo el presupuesto del Ayuntamiento de Madrid registra un descenso por la necesidad de ajustar el gasto al volumen de los ingresos previstos, que está muy por debajo de ejercicios anteriores. El descenso se sitúa en 2011 en un 8,9% tomando en cuenta el Presupuesto SEC, o en un 8,3 por ciento -410 millones euros- si tomamos como referencia el presupuesto administrativo, de manera que pasa de los 4.966,56 millones de 2010 a los 4.526,20 millones del próximo ejercicio, aproximándose a cifras de 2007. A pesar del ajuste,
el Gobierno de la Ciudad ha planificado las cuentas de 2011 de manera que los ciudadanos no sufran recortes de prestaciones ni subidas de impuestos. El único capítulo que no se ve afectado por los recortes es el de las operaciones financieras, que pasa de 257,38 a 294,63 millones, con el objetivo de reducir, por segundo año consecutivo, la deuda del Ayuntamiento. Y
por los gastos impropios -prestaciones que corresponden a otras administraciones- destina un 23,56 del presupuesto: 335 € por habitante.
Mayores y discapacitados mantienen sus prestaciones
El Presupuesto 2011 garantiza a los ciudadanos que las prestaciones que demandan los madrileños, en especial los colectivos y grupos de población más vulnerables y desfavorecidos -con prioridad para mayores y discapacitados- se mantendrán en los mismos niveles que han alcanzado.
No suben los impuestos
No habrá subida de impuestos, ni siquiera se actualizarán al IPC. Es más, la tasa de basuras baja un 9% y se amplían los supuestos de exención a los contribuyentes con menor capacidad económica al elevar entre el 4,7% y el 7,7% el límite de ingresos familiares para acogerse a ella, lo que supone un 13% menos de recaudación. Y el impuesto con mayor repercusión en los ingresos tributarios, el de Bienes Inmuebles (IBI), se mantiene en el 0,581%, por debajo del que aplican las grandes ciudades españolas.