Pilar Álvarez para elpais.com
El Palacio de Congresos de Madrid, en el número 99 del Paseo de la Castellana, lleva nueve meses sin un solo evento. En diciembre de 2012 se aprobó una suspensión “temporal” de la actividad que se mantiene y ha convertido el recinto en un edificio fantasma con 28 empleados mano sobre mano. El Instituto de Turismo de España (Turespaña, dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo) busca un nuevo futuro para el centro, que gestiona desde 2009. El proyecto incluye una galería comercial, entre otras modificaciones, que se situaría justo enfrente del centro comercial que prevé Florentino Pérez en el estadio Santiago Bernabéu. Industria anunció hace más de un año que privatizaría el palacio, una propuesta que aún no se ha puesto en marcha pero que va en paralelo con los planes de futuro para la sede estatal.

La idea es incluir tiendas de lujo y empresas de servicios, como agencias de azafatas, según fuentes de la Secretaría de Estado de Turismo. Pero el proyecto tiene por delante un largo periodo de tramitación, mientras el palacio continúa sin actividad y sin ingresos.
El aviso de cierre temporal llegó un día antes del sorteo de la Lotería de Navidad, que el palacio albergaba desde 2010. El 21 de diciembre, la Secretaría de Estado de Turismo aprobó la “suspensión temporal” de la actividad en el recinto, construido por el arquitecto Pablo Pintado y Riba e inaugurado en 1970. “Nos pilló de sorpresa, pensábamos que el sorteo se haría aquí”, señala uno de los trabajadores. La resolución señalaba que parte de las instalaciones se encontraban “en un estado deficiente de conservación” y que había observaciones “no subsanadas” en el informe de la Inspección Técnica de Edificios (ITE), por lo que debían analizar las condiciones del palacio para “la prestación de servicios en el mismo con plena seguridad para personas y bienes”.
La idea es incluir tiendas de lujo y empresas de servicios, como agencias de azafatas, según fuentes de la Secretaría de Estado de Turismo. Pero el proyecto tiene por delante un largo periodo de tramitación, mientras el palacio continúa sin actividad y sin ingresos.
El aviso de cierre temporal llegó un día antes del sorteo de la Lotería de Navidad, que el palacio albergaba desde 2010. El 21 de diciembre, la Secretaría de Estado de Turismo aprobó la “suspensión temporal” de la actividad en el recinto, construido por el arquitecto Pablo Pintado y Riba e inaugurado en 1970. “Nos pilló de sorpresa, pensábamos que el sorteo se haría aquí”, señala uno de los trabajadores. La resolución señalaba que parte de las instalaciones se encontraban “en un estado deficiente de conservación” y que había observaciones “no subsanadas” en el informe de la Inspección Técnica de Edificios (ITE), por lo que debían analizar las condiciones del palacio para “la prestación de servicios en el mismo con plena seguridad para personas y bienes”.