Situado en la playa urbana del parque de Arganzuela y con servicio complementario de tumbonas
El próximo mes de julio abrirá sus puertas el primer establecimiento de hostelería de Madrid Río, un café situado en la playa urbana del parque de Arganzuela, que incluye el servicio complementario de tumbonas. El concurso convocado para su explotación estará resuelto a finales del mes de junio, por lo que el adjudicatario lo pondrá en funcionamiento a continuación, ya que el establecimiento, que ha sido construido por el Ayuntamiento, está totalmente terminado. Posteriormente, a finales de verano, abrirán también sus puertas otros cuatro establecimientos de hostelería que han sido recientemente adjudicados y que vienen a complementar la oferta medioambiental, deportiva y cultural ya existente en el parque.
De estos cuatro establecimientos, dos son cafeterías y los otros dos cafés, diferenciándose fundamentalmente porque en el primer caso disponen de cocina para prestar servicios de restauración sencilla. Todos ellos están situados en el Salón de Pinos que discurre por la margen derecha del río Manzanares: un café al sur del Puente de Segovia; una cafetería a la altura de la presa histórica número 6 del río, en las cercanías de la Calle San Rufo; otra cafetería en las proximidades del nuevo puente singular del parque de Arganzuela, y un café a la altura de la Calle San Zacarías.
La directora general de Turismo, Ángeles Alarcó, acompañada por el alcalde de Villanueva de la Cañada, Luis Partida, han inaugurado la 
Llega de nuevo al Palacio de Deportes una cita obligada para aquellos que apuestan por la calidad, el buen gusto gastronómico y la buena comida.
La Comunidad anima a los madrileños a recorrer los municipios de la región durante los días festivos, para lo que ofrece innumerables propuestas para realizar turismo rural, deportes al aire libre o senderismo que invitan a disfrutar de un entorno natural, además del patrimono cultural o las actividades gastronómicas.
El Ayuntamiento de Madrid quiere que el Palacio de Cibeles sea un lugar en el que se puedan admirar obras de arte en sus salas de exposiciones, pero también alegrar el estómago una vez terminado el recorrido cultural. Por eso ha habilitado un espacio destinado a restaurante y otro a cafetería.
La reapertura de este Museo del Vino contribuye a complementar la oferta turística y a potenciar el enoturismo en la región, ya que este espacio supone un recurso turístico más del municipio, junto a La Lonja y al Centro de Interpretación Turística. A través de dos espacios diferenciados, la bodega y la cueva, el visitante puede recorrer la historia, los procesos de elaboración, las bodegas y el vino a través de los cinco sentidos. 
