
La Comunidad de Madrid impulsa la inversión y el desarrollo en nuevas técnicas de recogida selectiva y gestión de recursos que permitan a la región avanzar hacia el ‘vertido cero’, que la Unión Europea ha fijado para 2020.
Con este motivo, el consejero en funciones de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Carlos Izquierdo, ha visitado en Arganda del Rey el Grupo TR2, una agrupación de empresas de servicios para la gestión de residuos y reciclajes urbanos que se caracterizan por experimentar con las más modernas técnicas de reciclaje. La Comunidad de Madrid ha otorgado a este grupo de empresas la autorización como gestor de residuos en la región.
Izquierdo ha destacado durante su visita la importancia de la colaboración ciudadana: “En el momento que separamos los envases en la bolsa amarilla, depositamos nuestros residuos en el contenedor marrón o visitamos el punto limpio estamos contribuyendo decisivamente a la mejora del planeta y el futuro de las nuevas generaciones”, siendo muy importante prevenir la generación de nuevos residuos, algo clave en la Comunidad de Madrid, donde cada habitante genera una media de 400 kilogramos de residuos anuales.
Con este motivo, el consejero en funciones de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Carlos Izquierdo, ha visitado en Arganda del Rey el Grupo TR2, una agrupación de empresas de servicios para la gestión de residuos y reciclajes urbanos que se caracterizan por experimentar con las más modernas técnicas de reciclaje. La Comunidad de Madrid ha otorgado a este grupo de empresas la autorización como gestor de residuos en la región.
Izquierdo ha destacado durante su visita la importancia de la colaboración ciudadana: “En el momento que separamos los envases en la bolsa amarilla, depositamos nuestros residuos en el contenedor marrón o visitamos el punto limpio estamos contribuyendo decisivamente a la mejora del planeta y el futuro de las nuevas generaciones”, siendo muy importante prevenir la generación de nuevos residuos, algo clave en la Comunidad de Madrid, donde cada habitante genera una media de 400 kilogramos de residuos anuales.