Este proyecto se enmarca en un ambicioso Plan de Turismo Ornitológico que pretende potenciar el turismo verde para la observación de aves especialmente entre los principales países consumidores Estados Unidos y Reino Unido que tienen 56 millones posibles clientes.
Sarasola ha destacado que “la riqueza avifaunística de la Comunidad es muy relevante, a pesar de su reducida extensión territorial, gracias a la diversidad de sus ecosistemas y al excelente grado de conservación de los mismos. Y ello se traduce en la presencia significativa de algunas de las especies más amenazadas de la fauna europea, como son el Águila Imperial Ibérica, el Buitre Negro, la Cigüeña Negra o la Avutarda Común“.