La estación de Metro de Chamartín acoge un nuevo tren clásico restaurado. Se trata del tipo ‘Salamanca’, formado por dos coches que comenzaron a funcionar en 1943, con un estilo mucho más austero y sobrio que los anteriores. Esto no solo debido al periodo de posguerra en el que fueron construidos, donde existía escasez de repuestos, sino a la experiencia de esos años, donde se vio que en la práctica eran mejores los materiales más funcionales y duros que los utilizados hasta entonces. Esta exposición se enmarca en las actividades que está organizando la Comunidad de Madrid con motivo de la celebración del Centenario del Metro de Madrid que se celebra a lo largo de este 2019.

En la época en la que circulaba este tren, que se incorpora a la exposición, era necesario atender una mayor demanda de viajeros de lo estipulado hasta entonces. Para atender esa necesidad de capacidad de transporte se adquirieron este tipo de trenes, que aumentaron la longitud de caja y fueron, además, los primeros coches con cuatro puertas por cada lado, al fin de facilitar la salida y entrada de viajeros. Lo trenes alcanzaban los 55 kilómetros por hora.

En la época en la que circulaba este tren, que se incorpora a la exposición, era necesario atender una mayor demanda de viajeros de lo estipulado hasta entonces. Para atender esa necesidad de capacidad de transporte se adquirieron este tipo de trenes, que aumentaron la longitud de caja y fueron, además, los primeros coches con cuatro puertas por cada lado, al fin de facilitar la salida y entrada de viajeros. Lo trenes alcanzaban los 55 kilómetros por hora.