La Comunidad de Madrid ha concluido una serie de trabajos de mejora en la carretera M-957 dirigidos a incrementar la seguridad vial de esta vía que da acceso al Pantano de San Juan desde el municipio de San Martín de Valdeiglesias. Estas obras, que han supuesto una inversión de algo más de 100.000 euros, han actuado en el tramo de cinco kilómetros entre los puntos kilométricos 0,700 y 5,800.
Estos trabajos benefician sobre todo a los habitantes de San Martín de Valdeiglesias y de las urbanizaciones del entorno, pero también a los numerosos visitantes que acuden a disfrutar de su tiempo de ocio en esta carretera. Por este motivo, la Dirección General de Carreteras ha optado por acometerlos en las primeras semanas de octubre para evitar la afección al tráfico en la temporada de verano, cuando se multiplica la intensidad de circulación, y antes de que llegue el mal tiempo.
Las obras se enmarcan dentro de los trabajos de conservación que realiza periódicamente la Comunidad de Madrid. Estos trabajos tienen una importancia fundamental, puesto que repercuten directamente en la seguridad de los conductores. Por ello, a pesar de las limitaciones impuestas por el actual contexto económico, el Gobierno regional no ha dejado de invertir en este tipo de tareas, de forma que el presupuesto se ha incrementado año tras año hasta superar los 60 millones de euros anuales.
Sólo este verano, entre junio y agosto, la Comunidad de Madrid ha invertido casi cinco millones de euros en diversas obras de conservación que han mejorado el estado de 70 kilómetros de carreteras. El resultado de esta apuesta por el mantenimiento de las carreteras es que desde 2001 ha habido un descenso de la mortalidad en las carreteras madrileñas de un 80%.
Estos trabajos benefician sobre todo a los habitantes de San Martín de Valdeiglesias y de las urbanizaciones del entorno, pero también a los numerosos visitantes que acuden a disfrutar de su tiempo de ocio en esta carretera. Por este motivo, la Dirección General de Carreteras ha optado por acometerlos en las primeras semanas de octubre para evitar la afección al tráfico en la temporada de verano, cuando se multiplica la intensidad de circulación, y antes de que llegue el mal tiempo.
Las obras se enmarcan dentro de los trabajos de conservación que realiza periódicamente la Comunidad de Madrid. Estos trabajos tienen una importancia fundamental, puesto que repercuten directamente en la seguridad de los conductores. Por ello, a pesar de las limitaciones impuestas por el actual contexto económico, el Gobierno regional no ha dejado de invertir en este tipo de tareas, de forma que el presupuesto se ha incrementado año tras año hasta superar los 60 millones de euros anuales.
Sólo este verano, entre junio y agosto, la Comunidad de Madrid ha invertido casi cinco millones de euros en diversas obras de conservación que han mejorado el estado de 70 kilómetros de carreteras. El resultado de esta apuesta por el mantenimiento de las carreteras es que desde 2001 ha habido un descenso de la mortalidad en las carreteras madrileñas de un 80%.
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