martes, 4 de noviembre de 2008

Unas preguntas sobre Madrid

Escrito el 4 de noviembre por Pablo




Hola amigos de espormadrid,

Como grandes forofos y defensores de la ciudad de Madrid que sois, me animo a exponeros en este mensaje algunas ideas que llevan rondando mi cabeza desde hace días, y que me causan sorpresa y algo de tristeza.

La semana pasada estuve paseando por la remodelada calle Arenal, cuya peatonalización se terminó recientemente. En su día, tras la inauguración, me alegré de ver el resultado de las obras: el nuevo pavimento y los árboles daban otro aspecto a esta calle tan popular. Sin embargo, para mi asombro, el pasado miércoles observé que muchos de estos árboles habían sido arrancados de cuajo y otros apresuradamente protegidos con unas verjas cilíndricas (digo apresuradamente por lo improvisado de sus anclajes, muchos de los cuales sobresalían varios centímetros del suelo). También me percaté de que el pavimento ofrecía un aspecto lamentable: algunas losas sueltas, otras rotas y numerosas manchas (supongo que causadas por chicles y vomitonas).

Estos hechos tendrían una importancia relativa si no fuera porque también he detectado algunos de ellos en la recién inaugurada calle Fuencarral, en la nueva explanada enfrente de Príncipe Pío, en la renovación de la calle Montera, en la nueva plaza de Soledad Torres Acosta, en la Plaza de Santo Domingo, etc.

No pongo en duda que el principal causante de estos destrozos es el vandalismo y dejadez de nuestros conciudadanos. No obstante, me vienen a la mente tres cuestiones:

  • ¿No peca el Ayuntamiento de ingenuidad al diseñar estas remodelaciones, sabiendo de los destrozos comunes que se pueden ocasionar? Algunas de ellas, en mi opinión, han sido proyectos muy necesarios, pero poco realistas por su poca, digamos, robustez.

  • ¿El acabado de estas obras es de suficiente calidad? No dudo que las nuevas losas grises y rosas usadas en nuestras aceras son de un material excelente, pero me parece difícil de justificar que a los pocos meses se desprendan con tanta facilidad y adquieran ese color tan feo.

  • Y por último, pero esencial, ¿no tiene el Ayuntamiento un presupuesto dedicado a mantenimiento y limpieza para arreglar estos defectos?


Os dejo estos pensamientos porque sé que compartís conmigo el orgullo de ser madrileños, y las ganas de convertir nuestra ciudad en un sitio mejor y más civilizado.

Y, todo sea dicho, porque muchos sospechamos que el Alcalde os lee desde su casa

Muchas gracias y un cordial saludo.

Pablo

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