Con la situación excepcional que estamos viviendo en las últimas semanas, ha quedado patente una vez más la importancia de nuestro personal sanitario. Ellos luchan y cuidan para que todos los ciudadanos tengan a su disposición los recursos suficientes a su alcance. Por ello, es imprescindible que cuenten con el equipo necesario y, en caso de adquirir productos, se acuda a empresas especializadas, como Prolaboral, y no a cualquier establecimiento.
En el caso concreto del personal sanitario, es una prioridad innegociable acogerse a la normativa y evitar, de ese modo, que cualquier persona que trabaja en un hospital sufra un accidente laboral.
En todos los trabajos, el calzado es un instrumento elemental a la hora de desarrollar las funciones de manera correcta. De hecho, los podólogos han alertado en los últimos años acerca de la necesidad de no seguir modas y recurrir a un calzado óptimo. Sin embargo, en el trabajo en hospitales y centros médicos, este instrumento es todavía más importante.
Tanto médicos como enfermeros, así como todo el personal que trabaja dentro del hospital, están en constante movimiento y pasan muchas horas de trabajo de pie. En situaciones excepcionales como las que estamos viviendo, cualquier resbalón puede dar pie a sufrir un problema mayor que podría haberse evitado.
Por ello, el Ministerio de Trabajo contiene en su normativa todas las cuestiones relativas al calzado en el ámbito sanitario. Los materiales con los que estén fabricados los zuecos y zapatos del personal deben cumplir unos requisitos mínimos, como evitar el deslizamiento, así como ser cómodos para quien los porta.
Dentro de los zapatos sanitarios que se adaptan a la normativa, existe un amplio repertorio y numerosas empresas que lo ofrecen. Sin embargo, es importante no adquirir estos productos en cualquier centro, ya que no todas las empresas conocen la normativa vigente. En este sentido, lo mejor es recurrir a empresas con recorrido y que hayan sido recomendadas por otros profesionales.
En cualquier caso, el calzado que se escoja debe cumplir unas condiciones que permitan desenvolverse de manera cómoda y rápida. Debemos pensar que, en los hospitales, el tiempo es oro, de modo que la agilidad es un elemento indispensable. Por ello, el peso de los zapatos o zuecos debe ser ligero. Se debe intentar, en todo momento, evitar la fatiga y sobrecarga del personal. Además, los materiales utilizados deben ser flexibles y fáciles de limpiar, ya que en un hospital es vital mantener el equipo de trabajo y el vestuario limpio.
No obstante, ello no debe impedir otras facultades igual de importantes. En todo momento, los pies del personal deben estar protegidos y ofrecer estabilidad. Si no se adquiere el calzado adecuado, es muy probable que comiencen a aparecer problemas articulatorios a largo plazo, ya que gran parte del día los sanitarios se desplazarán con este calzado. Por ello, la amortiguación es esencial.
Por lo tanto, escoger calzado de calidad es indispensable para el día a día del personal del hospital. Para ello, lo mejor es acudir a establecimientos especializados en este tipo de productos.
En el caso concreto del personal sanitario, es una prioridad innegociable acogerse a la normativa y evitar, de ese modo, que cualquier persona que trabaja en un hospital sufra un accidente laboral.
El calzado sanitario
En todos los trabajos, el calzado es un instrumento elemental a la hora de desarrollar las funciones de manera correcta. De hecho, los podólogos han alertado en los últimos años acerca de la necesidad de no seguir modas y recurrir a un calzado óptimo. Sin embargo, en el trabajo en hospitales y centros médicos, este instrumento es todavía más importante.
Tanto médicos como enfermeros, así como todo el personal que trabaja dentro del hospital, están en constante movimiento y pasan muchas horas de trabajo de pie. En situaciones excepcionales como las que estamos viviendo, cualquier resbalón puede dar pie a sufrir un problema mayor que podría haberse evitado.
Por ello, el Ministerio de Trabajo contiene en su normativa todas las cuestiones relativas al calzado en el ámbito sanitario. Los materiales con los que estén fabricados los zuecos y zapatos del personal deben cumplir unos requisitos mínimos, como evitar el deslizamiento, así como ser cómodos para quien los porta.
Dentro de los zapatos sanitarios que se adaptan a la normativa, existe un amplio repertorio y numerosas empresas que lo ofrecen. Sin embargo, es importante no adquirir estos productos en cualquier centro, ya que no todas las empresas conocen la normativa vigente. En este sentido, lo mejor es recurrir a empresas con recorrido y que hayan sido recomendadas por otros profesionales.
En cualquier caso, el calzado que se escoja debe cumplir unas condiciones que permitan desenvolverse de manera cómoda y rápida. Debemos pensar que, en los hospitales, el tiempo es oro, de modo que la agilidad es un elemento indispensable. Por ello, el peso de los zapatos o zuecos debe ser ligero. Se debe intentar, en todo momento, evitar la fatiga y sobrecarga del personal. Además, los materiales utilizados deben ser flexibles y fáciles de limpiar, ya que en un hospital es vital mantener el equipo de trabajo y el vestuario limpio.
No obstante, ello no debe impedir otras facultades igual de importantes. En todo momento, los pies del personal deben estar protegidos y ofrecer estabilidad. Si no se adquiere el calzado adecuado, es muy probable que comiencen a aparecer problemas articulatorios a largo plazo, ya que gran parte del día los sanitarios se desplazarán con este calzado. Por ello, la amortiguación es esencial.
Por lo tanto, escoger calzado de calidad es indispensable para el día a día del personal del hospital. Para ello, lo mejor es acudir a establecimientos especializados en este tipo de productos.
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