El Ayuntamiento de Madrid acometerá desde esta semana y durante los meses de julio y agosto actuaciones pendientes de la remodelación de la Puerta del Sol que dependían de las preceptivas autorizaciones de Metro. Estos trabajos tienen que ver con la sustitución de:
- el ascensor que se encuentra al oeste de la plaza (frente a La Mallorquina).
- una serie de rejillas de ventilación que no cumplían las condiciones de accesibilidad.
Asimismo, durante el desarrollo de las obras se detectó una losa de hormigón en mal estado en el sitio en el que se ubicará definitivamente la Mariblanca que debe ser sustituida por razones de seguridad, así como una galería de servicios frente a la sede de la Comunidad de Madrid cuya cubierta debe ser reparada.
Al disponer ya de las correspondientes autorizaciones de Metro, todas estas actuaciones se realizarán durante los meses de julio y agosto para minimizar las afecciones a los usuarios y comerciantes de la plaza. Los trabajos, que se irán llevando a cabo de uno en uno y no todos a la vez para minimizar las molestias, no supondrán un obstáculo para la movilidad en la plaza y quedarán completamente acabados a finales de agosto, al igual que las obras en todas las calles aledañas.
Autorizaciones de Adif para cambiar el "tragabolas"
Estado futuro de acceso Cercanías
A partir del mes de septiembre, quedarán pendientes en la plaza dos actuaciones para las cuales el Ayuntamiento de Madrid aún no dispone de autorización por parte de Adif. Se trata de la sustitución del recinto que cubre las escaleras mecánicas de acceso a la estación de Cercanías y del ascensor de esta misma estación. En estos momentos, se está trabajando con Adif en la firma de un convenio que habilitará a la entidad ferroviaria a realizar la supervisión y aprobación de estos proyectos. Una vez obtenida esta aprobación y la correspondiente autorización de obras, el Ayuntamiento estará en condiciones de acometer la sustitución de ambos elementos como estaba previsto, por concurso público.
Remodelación compleja
Debido a la magnitud de esta intervención en el mismo corazón de la ciudad, con una afluencia peatonal de más de 250.000 peatones al día, ha sido necesario acometer las obras por partes para minimizar las afecciones a los establecimientos comerciales, a las labores de carga y descarga y a los numerosos transeúntes que tiene la zona durante todos los días del año.
Por otra parte, en el subsuelo de la plaza se encuentra uno de los mayores intercambiadores de transporte público de la ciudad, una macroestación que conecta tres líneas de metro (L1, L2 y L3) y dos líneas del ferrocarril de cercanías, las líneas C3 y C4, que conectan el centro de la ciudad con toda el área metropolitana de Madrid.
Cumpliendo los compromisos asumidos por el Ayuntamiento, la pavimentación de la plaza concluyó a finales del mes de abril, al mismo tiempo que el traslado de la estatua de Carlos III y la configuración de la nueva fuente que lo alberga, así como previamente se trasladó la estatua del Oso y el Madroño a su emplazamiento definitivo. Sin embargo, otras obras que estaban previstas no pudieron acometerse en ese momento porque no se disponía de las autorizaciones correspondientes de los organismos de los que dependen las múltiples infraestructuras subterráneas presentes en la plaza, en particular Metro y Adif.
El próximo mes de septiembre, la plaza y su entorno estarán completamente funcionales y sin obras pendientes, excepto los mencionados accesos a la estación de Adif que se acometerán una vez que se obtengan las correspondientes autorizaciones.
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