miércoles, 3 de octubre de 2018

Proyecto ‘Hospital amable con la persona mayor’ en el Hospital Infanta Leonor

El Hospital Universitario Infanta Leonor está poniendo en marcha un proyecto para adaptarse a las necesidades de las personas mayores con el fin de hacer más agradable su estancia hospitalaria. Éste incluye mejoras asistenciales, a través de la formación e implicación de todo el personal sanitario, y también estructurales, potenciando los valores humanos en la atención a este colectivo y sus acompañantes.

Hospital Infanta Leonor
El viceconsejero de Humanización de la Asistencia Sanitaria, Diego Sanjuanbenito, ha asistido a la presentación de la iniciativa, denominada ‘Hospital amable para la persona mayor’, acompañado por la directora gerente del centro hospitalario, Carmen Pantoja; la jefa de Geriatría, Fátima Brañas; y la presidenta de la Sociedad Madrileña de Geriatría y Gerontología, Carmela Mañas, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas Mayores.


Más del 40 % de los pacientes ingresados del Hospital Universitario Infanta Leonor son mayores de 65 años y uno de cada tres son mayores de 85 años. Existe evidencia científica de que este colectivo es más vulnerable a los daños colaterales que conlleva la hospitalización, llegando incluso a ser peores que la propia enfermedad. Conscientes de ello, el Hospital Universitario Infanta Leonor trabaja para adaptarse a las necesidades de estos pacientes actuando en distintos frentes, a través de un proyecto liderado por el Servicio de Geriatría, con un plazo de implantación de tres años, que pretende abarcar a todos los profesionales y áreas (hospitalización, urgencias, quirófanos, diálisis, consultas externas…) de este centro y también del Hospital Virgen de la Torre, un centro de corta y media estancia integrado en el Infanta Leonor.

El hospital'descansa' y 'se mueve'


De forma paralela se van a acometer adaptaciones estructurales, como la instalación de relojes y calendarios en todas las habitaciones, para evitar la desorientación de los pacientes; ampliación del número de andadores a su disposición, para que puedan moverse durante su ingreso; y la simplificación de indicaciones y carteles, para facilitar su orientación por las instalaciones. También se colocarán carteles en las distintas plantas de hospitalización dirigidos a los acompañantes del paciente con ideas clave para prevenir la confusión: que beba agua suficiente, si no lo tiene prohibido por prescripción médica; que tenga a mano sus gafas o audífono, si los necesita; que esté acompañado y entretenido, o que le recuerden al menos una vez al día qué día es, dónde está y qué le pasa.



Otros carteles animarán a “salir de la cama” durante la hospitalización -que no permanezcan encamados o sentados todo el tiempo, siempre que sea posible-, por los beneficios que ello tiene sobre el cerebro (mejora el estado de ánimo, se duerme mejor), corazón (mejora la circulación y favorece que la tensión arterial sea más estable), piel (disminuye el riesgo de úlceras y heridas), así como huesos y músculos (hace sentirse más fuerte, menos débil, reduce el riesgo de caídas y minimiza el dolor de las articulaciones).

Además, se emitirán mensajes a través del sistema de megafonía para indicar a usuarios y profesionales el inicio del momento de reposo y sueño (“El hospital descansa”) al igual que el comienzo de un nuevo día (“El hospital se mueve”). El proyecto también contempla otras acciones que trascienden la asistencia sanitaria y podrían implementarse, como la creación de una red de voluntariado de apoyo a la persona mayor en colaboración con la Universidad.

No hay comentarios :

Publicar un comentario