En el año 2011 y en los nueve meses de 2012 la sección canina, perteneciente a la Unidad de Apoyo a la Seguridad de la Policía Municipal ha realizado 14.855 actuaciones. Desde que fuera creada en septiembre de 1983, esta unidad ha demostrado en numerosas ocasiones su eficacia y se ha convertido en un instrumento imprescindible para el servicio del cuerpo a los madrileños.
El delegado de Medio Ambiente y Seguridad, Antonio de Guindos, acompañado por la concejal del Área Delegada de Seguridad y Emergencias, Fátima Núñez, ha visitado la sección, que está ubicada en la Casa de Campo y cuenta en la actualidad con 25 perros (cuatro de raza Cocker Spaniel, un pastor Belga "Malinois", un pastor Belga y 19 pastores alemanes) que han hecho una exhibición de sus habilidades.
"Han participado en más de 5.000 registros para la localización de explosivos en edificios, en vehículos, en parques, en vía pública; en 600 registros para la detección de estupefacientes, y han patrullado este año por las zonas turísticas y más concurridas de la ciudad, con carácter preventivo", ha dicho el delegado durante la visita. Guindos ha elogiado el esfuerzo de los "38 policías que forman parte de la sección, que está operativa las 24 horas del día, para contribuir a garantizar la seguridad en Madrid".
Para el adiestramiento de los perros y el quehacer diario, la sección tiene una plantilla de doce guías en turno de mañana, trece guías en turno de tarde y tres guías en turno de noche. Funcionan 24 horas al día y cuentan con cuatro vehículos para el traslado de los canes.
El delegado de Medio Ambiente ha recordado que en 2002 la sección canina fue distinguida con la medalla al mérito policial por el pleno del Ayuntamiento de Madrid a raíz de dos actuaciones habidas el año interior: los perros estuvieron ayudando a localizar a las víctimas de dos derrumbes de viviendas en dos edificios de la ciudad: uno en la calle Factor y otro en la calle Princesa esquina a Alberto Aguilera.
La sección canina participa también en el adiestramiento de perros policías para defensa y detección de explosivos y drogas, apoya a los servicios de Vigilancia y Protección, participa en búsqueda de personas en catástrofes y realiza exhibiciones populares y en visitas educativas a colegios de la ciudad.
"En estos momentos de crisis económica, hay que poner más en valor las cosas con las que contamos y que día a día dan servicio a los vecinos, visitantes y turistas de la ciudad de Madrid. Y buen ejemplo de ello es la sección canina", ha dicho Antonio de Guindos.
A lo largo de este año, la sección canina ha realizado 4.258 actuaciones entre las que se recuerda la localización de 240gr de hachís debajo del asiento del conductor en un vehículo Seat León (enero), la localización de 9 bellotas de hachís de 65gr escondidas detrás del aparato auto radio en un vehiculo (febrero), la captura de perros, gatos, cabras o jabalíes colaborando con el Centro de protección animal, la localización de 373.4gr de hachís que se encontraban en dos compartimentos semiocultos en la zona del volante y zona trasera de un vehículo.
La sección canina fue creada en 1983 con seis perros que habían sido entrenados por la Guardia Civil en su escuela de adiestramiento de El Pardo. El Ayuntamiento había invertido un millón de pesetas en su adquisición, aparte de los gastos de mantenimiento, asistencia veterinaria e higiénica que ascendían entonces a ciento cincuenta pesetas diarias por perro. Todos ellos recibieron un adiestramiento básico de obediencia y con posterioridad adiestramientos especiales en las técnicas de defensa y seguridad, detección de sustancias estupefacientes, detección de sustancias explosivas y localización y rescate de personas.
En un principio fueron alojados en unas instalaciones provisionales mientras se construían las definitivas, adecuadas a sus características. Las misiones para las que se creó la Unidad fueron la vigilancia en la entrada y salida de los colegios y la búsqueda de personas heridas o desaparecidas, siendo también de gran utilidad en las labores de vigilancia de instalaciones municipales y públicas con gran espacio abierto para cubrir, y para defender a los ciudadanos en los parques y en lugares públicos de gran afluencia, como las estaciones ferroviarias.
Las últimas incorporaciones tanto de guías caninos como de perros se realizó en el año 2010, cuando aumentaron en 8 los guías caninos y en 8 los perros, estos últimos todos provenientes de donaciones.
El delegado de Medio Ambiente y Seguridad, Antonio de Guindos, acompañado por la concejal del Área Delegada de Seguridad y Emergencias, Fátima Núñez, ha visitado la sección, que está ubicada en la Casa de Campo y cuenta en la actualidad con 25 perros (cuatro de raza Cocker Spaniel, un pastor Belga "Malinois", un pastor Belga y 19 pastores alemanes) que han hecho una exhibición de sus habilidades.
"Han participado en más de 5.000 registros para la localización de explosivos en edificios, en vehículos, en parques, en vía pública; en 600 registros para la detección de estupefacientes, y han patrullado este año por las zonas turísticas y más concurridas de la ciudad, con carácter preventivo", ha dicho el delegado durante la visita. Guindos ha elogiado el esfuerzo de los "38 policías que forman parte de la sección, que está operativa las 24 horas del día, para contribuir a garantizar la seguridad en Madrid".
Para el adiestramiento de los perros y el quehacer diario, la sección tiene una plantilla de doce guías en turno de mañana, trece guías en turno de tarde y tres guías en turno de noche. Funcionan 24 horas al día y cuentan con cuatro vehículos para el traslado de los canes.
El delegado de Medio Ambiente ha recordado que en 2002 la sección canina fue distinguida con la medalla al mérito policial por el pleno del Ayuntamiento de Madrid a raíz de dos actuaciones habidas el año interior: los perros estuvieron ayudando a localizar a las víctimas de dos derrumbes de viviendas en dos edificios de la ciudad: uno en la calle Factor y otro en la calle Princesa esquina a Alberto Aguilera.
La sección canina participa también en el adiestramiento de perros policías para defensa y detección de explosivos y drogas, apoya a los servicios de Vigilancia y Protección, participa en búsqueda de personas en catástrofes y realiza exhibiciones populares y en visitas educativas a colegios de la ciudad.
"En estos momentos de crisis económica, hay que poner más en valor las cosas con las que contamos y que día a día dan servicio a los vecinos, visitantes y turistas de la ciudad de Madrid. Y buen ejemplo de ello es la sección canina", ha dicho Antonio de Guindos.
A lo largo de este año, la sección canina ha realizado 4.258 actuaciones entre las que se recuerda la localización de 240gr de hachís debajo del asiento del conductor en un vehículo Seat León (enero), la localización de 9 bellotas de hachís de 65gr escondidas detrás del aparato auto radio en un vehiculo (febrero), la captura de perros, gatos, cabras o jabalíes colaborando con el Centro de protección animal, la localización de 373.4gr de hachís que se encontraban en dos compartimentos semiocultos en la zona del volante y zona trasera de un vehículo.
Desde 1983
La sección canina fue creada en 1983 con seis perros que habían sido entrenados por la Guardia Civil en su escuela de adiestramiento de El Pardo. El Ayuntamiento había invertido un millón de pesetas en su adquisición, aparte de los gastos de mantenimiento, asistencia veterinaria e higiénica que ascendían entonces a ciento cincuenta pesetas diarias por perro. Todos ellos recibieron un adiestramiento básico de obediencia y con posterioridad adiestramientos especiales en las técnicas de defensa y seguridad, detección de sustancias estupefacientes, detección de sustancias explosivas y localización y rescate de personas.
En un principio fueron alojados en unas instalaciones provisionales mientras se construían las definitivas, adecuadas a sus características. Las misiones para las que se creó la Unidad fueron la vigilancia en la entrada y salida de los colegios y la búsqueda de personas heridas o desaparecidas, siendo también de gran utilidad en las labores de vigilancia de instalaciones municipales y públicas con gran espacio abierto para cubrir, y para defender a los ciudadanos en los parques y en lugares públicos de gran afluencia, como las estaciones ferroviarias.
Las últimas incorporaciones tanto de guías caninos como de perros se realizó en el año 2010, cuando aumentaron en 8 los guías caninos y en 8 los perros, estos últimos todos provenientes de donaciones.
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