Desde hace mes y medio, uno de los patriarcas gitanos más importantes de España, José Romero Vargas, de 73 años, se encuentra ingresado en el hospital Doce de Octubre.
Sus familiares y amigos, fieles a las costumbres ancestrales de la etnia gitana, no han querido dejar solo a su querido y legendario familiar y muchos de ellos se encuentran acampados en los alrededores de dicho hospital.
El hospital autorizó a estas personas para que pudiesen acampar en los jardines del hospital. Allí cocinan, duermen y pasan las horas bajo un sol abrasador, acompañando a su carismático patriarca.
Algunos usuarios del hospital han denunciado al centro, alegando que estas personas se han hecho dueños y señores del hospital, algo que niega la dirección del centro, que afirma que los gitanos no han dado ningún problema al centro ni a los usuarios del hospital.
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