martes, 1 de enero de 2013

Discurso de Año Nuevo 2013 de Ignacio González, Presidente de la Comunidad de Madrid

Discurso de Año Nuevo 2013 de Ignacio González, Presidente de la Comunidad de Madrid
Este es el primer año que tengo el honor de dirigirme a todos los madrileños como Presidente de la Comunidad de Madrid para felicitarles y desearles lo mejor en el año que acabamos de estrenar.

Mis primeras palabras quiero que sean para reconocer los esfuerzos que los madrileños y todos los españoles han realizado durante este año 2012, porque sé que ha sido un año difícil para mucha gente.

En estos momentos tengo muy presente a las familias que sufren lo peor de esta crisis, a los madrileños que se encuentran sin trabajo, a los que han tenido que cerrar sus negocios, a los que han perdido su vivienda y a los que han tenido que buscar fuera las oportunidades que hoy no encuentran en nuestro país.

Pero soy también muy consciente del elevado número de madrileños que voluntariamente, a través de organizaciones sociales y religiosas, ponen de manifiesto su acentuado sentido de la solidaridad para contribuir con su esfuerzo y con sus recursos a hacer más llevadera esta crisis a los que menos tienen y a los que más lo necesitan. A ellos quiero agradecerles de corazón esta tarea.

Soy consciente también de que el año 2012 ha sido un año cambios y de decisiones difíciles de tomar. Sé que algunas son duras y que otras quizás no hayamos sabido explicarlas, pero todas ellas son necesarias si queremos superar la crisis económica manteniendo nuestra sociedad del bienestar.

Esconder los problemas o posponer las soluciones ya no es una opción. Hoy es necesario explicar a los ciudadanos la realidad de la situación que vivimos, aunque esta sea dura y decirles que es necesario que sigamos haciendo reformas, porque solo así, Madrid volverá a liderar la salida de esta crisis.

Gracias a esas reformas, nuestra región está aguantando mejor los envites de la crisis económica. Nuestros esfuerzos por la austeridad, el equilibrio presupuestario, la libertad económica y nuestro compromiso con la no subida de impuestos han conseguido que Madrid sea la primera economía de España y la región española que más confianza genera en el exterior.

Hay que decir con toda sinceridad que 2013 será un año duro pero también hay que decir con toda claridad que será mucho peor si no hacemos lo que estamos obligados a hacer.

Algunos de nuestros problemas son muy complejos, y hay que desconfiar de quien dice tener soluciones sencillas a problemas complejos. Yo no caeré en esa tentación. Hay que saber a qué nos enfrentamos para mirar el futuro con confianza. Debemos ser conscientes de nuestras dificultades pero también debemos ser conocedores de nuestras fortalezas.

Es necesario ajustar nuestros gastos a nuestros ingresos como hacen las familias madrileñas, que saben que no pueden gastar más de lo que tienen. Ese compromiso con el equilibrio presupuestario es necesario para recuperar la confianza en nosotros.
Para el próximo año, Madrid cuenta con 2.700 millones de euros menos como consecuencia de la caída de ingresos y ello exige sacrificios como los que estamos llevando a cabo en Sanidad.

Nuestra prioridad es salvaguardar los extraordinarios servicios públicos con los que contamos, y muy especialmente la Sanidad, la Educación, los Servicios Sociales y los Transportes.

Por eso dedicamos 9 de cada 10 euros de nuestro presupuesto a este objetivo, y los madrileños pueden estar seguros de que con estas medidas van a seguir contando con una Sanidad excelente, universal, pública, gratuita y de la máxima calidad. Nadie tendrá que pagar en un hospital madrileño para que se le atienda.

Para hacer todo esto posible es necesario introducir reformas que nos permitan racionalizar nuestros gastos para poder seguir prestando dichos servicios con menor coste.

Sé que la excelencia de nuestros servicios públicos se debe en gran medida al magnífico trabajo que realizan los profesionales que los atienden. Y sé también que para lograr esa mayor racionalización y eficiencia su participación es necesaria.
Por eso, en estos momentos quiero pedir la colaboración de los profesionales de nuestros servicios públicos para aprovechar al máximo los recursos que tenemos y lograr mantener los extraordinarios servicios que hoy disfrutamos.
Hoy en España se están planteando algunos debates preocupantes que ponen en cuestión nuestro modelo constitucional y la igualdad de todos los españoles.

Quiero, en este año que comienza, manifestar una vez más el firme compromiso de Madrid con los valores que inspiraron nuestra Constitución y con la unidad de España. Si alguien pretende dialogar y buscar mejoras para todos los españoles, nos encontrará dispuestos a hacerlo, pero si lo que se pretende es romper unilateralmente el marco común que todos nos hemos dado, que nadie dude que Madrid se opondrá y exigirá el cumplimiento estricto de la Ley porque el futuro de todos no puede decidirse por unos pocos, y menos aún desde la amenaza y el chantaje.

España requiere un nuevo impulso colectivo. Requiere que volvamos a creer en nuestras posibilidades, como lo hicimos en la Transición. Entonces dimos una lección histórica de responsabilidad al mundo. Y hoy podemos decirle al mundo que vamos a superar esta crisis, que lo vamos a hacer todos sin olvidar a nadie y que vamos a superar las dificultades manteniendo los valores que nos convierten en una sociedad solidaria y moderna. No va a ser fácil porque ninguna gran tarea se consigue sin esfuerzo. Será necesario seguir tomando medidas y trabajar duro, pero si lo hacemos y perseveramos, en este año 2013 podrán empezar a hacerse realidad las ilusiones que tenemos para nosotros, para nuestras familias, para Madrid y para España.

Feliz año 2013 a todos.

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