La Comunidad de Madrid bajará por tercer curso consecutivo las tasas universitarias, este descenso será de un 5% en grado y un 10% en máster, de cara al curso 2017/18. Si sumamos las reducciones de precios llevadas a cabo en 2015 y 2016, un alumno de grado se ahorrará a partir de ahora una media de 400 euros, y de 1.200 euros para aquellos que cursen un máster, respecto a los que hubiesen pagado por esas mismas matrículas tan hace solo dos años.
El Consejo de Gobierno ha conocido un informe que fija esta bajada de las tasas universitarias, que beneficiarán a más de 205.000 alumnos matriculados en las 6 universidades públicas madrileñas. El Gobierno regional destinará más de 16,7 millones para hacer efectiva esta nueva bajada de los precios de las matrículas universitarias en la región, acumulándose ya tres rebajas consecutivas de las tasas que pagan los alumnos para estudiar en las universidades de la región: un 20% en las enseñanzas de grado y un 30% en las de máster. Con estas tres bajadas se habrá revertido el 50% de la subida que llevó a cabo el anterior Gobierno en los años 2012 y 2013. Los precios por crédito se establecerán gradualmente en función del grado y de la experimentalidad de cada carrera, que depende de las necesidades de los recursos materiales para su docencia como laboratorios, material para prácticas, etc.
El Consejo de Gobierno ha conocido un informe que fija esta bajada de las tasas universitarias, que beneficiarán a más de 205.000 alumnos matriculados en las 6 universidades públicas madrileñas. El Gobierno regional destinará más de 16,7 millones para hacer efectiva esta nueva bajada de los precios de las matrículas universitarias en la región, acumulándose ya tres rebajas consecutivas de las tasas que pagan los alumnos para estudiar en las universidades de la región: un 20% en las enseñanzas de grado y un 30% en las de máster. Con estas tres bajadas se habrá revertido el 50% de la subida que llevó a cabo el anterior Gobierno en los años 2012 y 2013. Los precios por crédito se establecerán gradualmente en función del grado y de la experimentalidad de cada carrera, que depende de las necesidades de los recursos materiales para su docencia como laboratorios, material para prácticas, etc.