Termino esta serie de artículos recopilando y razonando (en la medida de mis posibilidades) todas aquellas medidas que entiendo deberían ser reformuladas o tal vez, sea yo el que no las entienda totalmente.
• “Expropiación por el Estado de las viviendas construidas en stock que no se han vendido para colocarlas en el mercado en régimen de alquiler protegido.”
Existen estudios que cifran en 3 millones de viviendas las que actualmente están desocupadas. Plantear expropiar este número no sé si sería asumible por el Estado. Además, tengo serias dudas de que ese parque de viviendas fuera gestionado eficientemente por el Estado.
• “Que se permita la dación en pago de las viviendas para cancelar las hipotecas.
• Prohibición de cualquier tipo de rescate o inyección de capital a entidades bancarias: aquellas entidades en dificultades deben quebrar o ser nacionalizadas para constituir una banca pública bajo control social.”
El sistema económico actual está construido bajo la premisa de la confianza sobre una estructura bancaria. Si la misma se derrumba, los ciudadanos perdemos nuestros ahorros, el crédito desaparece y la sociedad se hunde. Una banca pública no es garantía de buena praxis; ahí están las cajas de ahorros como ejemplo recurrente de ello.
En conclusión, debemos regular la actividad bancaria pero sin ahogarla pues quien sufriríamos las consecuencias seríamos nosotros. Creo en la viabilidad de la dación en pago pero no con carácter retroactivo. Si lo hiciéramos, muchas entidades se verían a asumir una situación crítica; y los perjudicados seríamos nosotros, eso no hay que olvidarlo.