El Ayuntamiento de Madrid ha activado su Plan Nevada con un aumento continuado de efectivos y medios mecánicos y manuales durante los últimos años. Los medios mecánicos y manuales para hacer frente a un posible temporal se han incrementado respecto al año pasado un 36,24 %, pasando de 1.043 a 1.421. Respecto a los medios humanos, con el nuevo contrato del SELUR, el dispositivo actual pasa de 5.258 operarios que hubo en 2021-2022 a 5.728 efectivos este año, un incremento del 8,94 %. Estos trabajadores son los encargados de esparcir sal y salmuera y de retirar nieve en caso de que se produzcan nevadas tanto en calzada como en acera.
También se han instalado sensores de temperatura en calzada y se ha puesto en marcha un mapa térmico que permite predecir con una mayor antelación y fiabilidad el riesgo de nevada y heladas, tal y como ha destacado el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Todas estas novedades se enmarcan en los nuevos pliegos de limpieza de espacios públicos y contemplan el dispositivo necesario para hacer frente a las nevadas y heladas que pudieran producirse ante una bajada brusca de las temperaturas.
El Ayuntamiento tiene almacenadas 3.570 toneladas de sal a granel, 280 toneladas de sal en sacos distribuidos estratégicamente, y la ciudad cuenta por primera vez con una capacidad para producción de salmuera, como fundente principal, de 2.250 m3/día. En este sentido, se prioriza el uso de salmuera como tratamiento preventivo ya que se puede distribuir de forma más rápida y homogénea y permanece más tiempo sobre el pavimento, sobre todo en las calzadas, sin acumularse en los bordillos y en las ruedas de los vehículos, evitándose así un exceso de sal.
A todos estos fundentes se suman este año, además, 61 toneladas de acopio de cloruro cálcico probado durante el temporal Filomena. El cloruro cálcico es un buen complemento de la sal en las labores preventivas cuando la temperatura alcanza valores negativos de cuatro grados centígrados, fundiendo la nieve cuando la sal por sí sola no actúa.
Elementos mecánicos: cuñas, salmueros y camiones
El Plan Nevada llega con medios mecanizados de extendido de sal, además de saleros, salmueros y equipos combi para el extendido de sal húmeda. También se instalan cuñas en los vehículos, sustituyendo a las palas más estrechas y sin posibilidad de acumular la nieve en ambas márgenes. Todos los efectivos están preparados para actuar las 24 horas conforme evolucionen las condiciones meteorológicas.
La flota se adapta y los números también crecen hasta alcanzar los 1.421 elementos mecánicos. Más cantidad y variedad. Del total de este año, 236 son equipos mecánicos, es decir, vehículos equipados con algún dispositivo para su empleo en el Plan Nevada como puede ser salero, salero con cuña y salmuero, salmuero con cuña o una combinación salero-salmuero y salero-salmuero con cuña o camiones de peinado. Concretamente, 150 unidades cuentan con cuñas, 93 con salero y 116 son salmueros, incrementándose en un 211 % respecto a la temporada pasada, entre otros elementos.
El resto son 1.185 equipos manuales que incorporan medios para la retirada y el salado de aceras y cuentan con carrito quitanieves, cuña y fresadoras manuales. De estos, 494 son saleros manuales y 168 cuentan con cuña manual.
En caso de medidas extraordinarias, SELUR cuenta con 28 vehículos y 316 personas, que tienen para sus funciones 144.000 litros diarios de producción de salmuera y 420 toneladas de sal.
Puntos de actuación preferente
El Ayuntamiento tiene detectados 1.427 puntos de actuación preferente, donde se extienden los fundentes cuando se necesita para evitar la formación de placas de hielo. Son los entornos de determinados centros de servicios públicos como hospitales, colegios, galerías comerciales o juntas de distrito para garantizar el acceso a sus instalaciones.
Ante la caída de nieve se salarán los puntos prioritarios de la ciudad como parques de bomberos, bases de SAMUR-Protección Civil y Samur Social, centros de salud, hospitales, comisarías de policía, puntos de la red de transporte o centros docentes, además de las zonas propensas a la formación de hielo.
Puesta a punto, sensores y mapa térmico
Los distribuidores de sal y los equipos auxiliares específicos para proceder en caso de nevadas han sido revisados y puestos a punto por personal técnico cualificado. Además, la Dirección General de Servicios de Limpieza y Residuos ha implementado el mapa térmico y el sistema MDSS (Sistema de Apoyo a la Decisión de Mantenimiento de Invierno-Decission Support System for Winter Maintenance) que permite predecir con una mayor antelación y fiabilidad el riesgo de nevada y helada. Es decir, una mejor y más adecuada distribución de los medios disponibles tanto para el tratamiento preventivo como el tratamiento correctivo.
Las actuaciones se planifican en base a sistemas de ayuda a la toma de decisiones como la instalación de sensores en calzada en aquellas zonas umbrías propensas a la formación y hielo. Esos serán también focos de especial vigilancia, detectados por estos sensores que se irán instalando de manera progresiva. En función de la previsión meteorológica, se establecen distintas prioridades según la calificación que tenga la calle en el mapa térmico y se determina la hora de comienzo del tratamiento preventivo en aquellas calles en las que determine el MDSS.
Por ejemplo, el Ayuntamiento, en base a las previsiones meteorológicas y una vez que la ciudad entra en fase de prealerta (desde las 72 horas hasta las 16 horas previas al riesgo del inicio del fenómeno meteorológico), puede suprimir los baldeos con agua regenerada en la ciudad y proceder al salado de las zonas sombrías y proclives a la formación de placas de hielo, así como de los puntos de actuación preferente de la ciudad.
Trabajos en tres fases
El Plan de Vialidad Invernal del Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad entra en activo una vez que lo declara la Dirección General de Emergencias. El protocolo de trabajo de la Dirección General de Servicios de Limpieza y Residuos contempla tres fases en función de los niveles de alerta:
- La fase de prealerta se activa desde las 72 horas hasta las 16 horas previas al riesgo del inicio del fenómeno meteorológico. Es entonces cuando se prepara el material fundente, se ponen a punto los diferentes medios mecánicos y se comunica y se prepara al personal del servicio. Se esparce sal en puntos de interés e itinerarios principales de la ciudad y en calzada.
- La segunda fase, la de alerta, se activa desde el inicio del fenómeno meteorológico adverso hasta la finalización de la nevada y contempla la eliminación de la nieve en aceras y calzadas.
- La última fase, la de normalización, se desarrolla desde la finalización de la nevada hasta la apertura de pasillos en aceras y despejado de nieve en calzadas.
Recomendaciones ciudadanas
- Deje su vehículo estacionado y utilice el transporte público.
- Si no queda otro remedio que utilizar el coche particular, infórmese de la situación meteorológica y de su incidencia en las calles y carreteras.
- Revise el estado del automóvil con especial atención a los neumáticos, los frenos y el anticongelante.
- Atención a las posibles placas de hielo en las zonas de sombra. /
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