Centro ABC de dibujo e ilustración

Quién me ha visto y quién me ve, hoy defendiendo a Gallardón, aka Faraón de Madrid. Creo patina Libertad Digital al acusar de favoritismo al alcalde por la cesión de un edificio al patronato de ABC. No debemos caer en ese juego, y recuerdo aquella "Legítima defensa" donde Matt Damon afirmaba al final -en referencia a los malvados aseguradores- eso de que hay una línea que habremos de cruzar alguna vez durante nuestra vida, pero que si lo hacemos demasiadas veces, dejaremos de verla. Con Zapatero en la Moncloa esa línea se cruza tres o cuatro veces, no queda otra, más dos adicionales en las que Rubalcaba nos empuje.



Pero herramos la noticia en dos puntos. Jihaaa. Primero de todo, porque la historia de ABC se remonta a 1903, mucho antes de que Zarzalejos o Vocento se hubieran hecho con el botín de los Luca de Tena. Ese impresionante archivo histórico (Fundación Colección ABC: 200.000 originales entre los que se ncluyen por ejemplo la revista Blanco y Negro) es lo que se va a exponer en el edificio cedido por el ayuntamiento de la capital en la calle Amaniel.

Segundo, porque no es sólo cosa de Gallardón, como aparece en la noticia, sino que la misma Esperanza Aguirre, y que nadie me la toqueee eh, se ha comprometido con este interesante proyecto cultural en pleno centro de Madrid, la Comunidad será quien financie la reforma de la antigua fábrica de Mahou, llevada a cabo por los arquitectos Aranguren & Gallegos. Según la noticia en ABC el Centro ABC de dibujo e ilustración contará con:

trabajos de artistas de la talla de Dalí, Juan Gris, Ramón Casas, Cecilio Pla, Ramón Gaya, Rafael de Penagos, Climent, Ramón Gómez de la Serna, José Caballero, Daniel Vázquez Díaz... Sin olvidar el genio de Mingote, ni los nuevos valores del panorama artístico, que cada año acuden a la convocatoria del premio ABC de Pintura y Fotografía, cuyos premiados y accésit pasan a engrosar la colección del periódico.

Ahí es nada.

¿Posible crítica que sí podemos hacer? La que recoge Madrid Digital. Y es que Isabel Rodríguez, como representante de la Asamblea Ciudadana Barrio de Universidad, afirma que en vez, o mejor, además de este proyecto, se echan en falta las promesas del alcalde -incumplidas- en otros ámbitos de la zona, incluida la de adquirir cinco edificios para suplir esas carencias sociales y deportivas:

“este punto de la ciudad es el barrio de Universidad, un barrio cuyos vecinos vienen solicitando equipamientos públicos imprescindibles desde hace mucho tiempo. No existen en este barrio instalaciones deportivas. El centro de salud es muy pequeño y está falto de recursos; el centro de especialidades queda lejos del barrio y está masificado”

“faltan escuelas infantiles y centros de mayores. No hay vivienda protegida en venta ni en alquiler. Los jóvenes no disponen de espacios de reunión ni de actividades específicas. Los inmigrantes viven hacinados. No hay aparcamientos suficientes para los residentes. Hay muchas viviendas necesitadas de rehabilitación [...] Por supuesto que la fundación en cuestión nos merece todo el respeto y creemos que se trata de una valiosa colección cultural, pero no entramos en eso; lo que pretendemos es denunciar la manipulación que hace el señor alcalde de la realidad, cuando afirma que con esta cesión se crean equipamientos sociales”