¿Qué hacer ante un incendio en tu vivienda?

El pasado viernes se produjo un incendio en Tetuán en el que dos mujeres resultaron heridas muy graves. Probablemente un incendio en tu vivienda es algo que no sucederá nunca, o quizás una vez en la vida, pero no viene mal estar prevenido por si fuera necesario enfrentarse a ello, aplicando medidas preventivas que no requieren de mucho esfuerzo.

Muchas gracias a Víctor Crespo por su ayuda en la realización de este artículo.

Prevención y actuación en incendio de edificio de viviendas

Se establecen dos partes importantes dentro de un bloque de viviendas a la hora de establecer pautas preventivas ante un incendio.

1.- Zona de Garaje, con gran acumulación de productos derivados del petróleo y otros (gasoil, gasolina, aceites, cauchos, etc.).
2.- Zona de Viviendas (trasteros, domicilios particulares).

1.- Prevención dentro de la Zona de garaje

Presenta un riesgo notable debido a la gran cantidad de materiales combustibles y al funcionamiento de motores de explosión.

El incendio de garaje es de los más virulentos, debido a la rápida propagación entre los vehículos adyacentes y a la alta inflamabilidad de sus componentes. A esto se suma una deficiente ventilación, lo que hace más compleja la labor de los servicios de extinción de incendios. Por estar en la parte inferior del edificio y acumular gran cantidad de materiales combustibles es necesario extremar las medidas de precaución en esta zona.

• Es muy importante que las puertas cortafuego de acceso desde el garaje a la zona de viviendas estén siempre cerradas. En caso de producirse un incendio en el garaje el humo accedería al hueco de ascensor y al hueco de escalera, extendiéndose el riesgo al resto del edificio.

• Llevar a cabo la inspección reglamentaria, donde se pongan a punto las BIES, areneros, extintores, revisión del sistema de extracción forzada de aire.
- Las BIES son los armarios metálicos que albergan tramos de mangueras en su interior, con una presión que viene determinada en la norma UNE-EN 671 (comprobar que albergue presión de agua).
- Los areneros son los cajones metálicos rojos con forma rectangular que se ubican en el suelo junto a las paredes del garaje. Contienen arena que se utiliza para neutralizar una posible mancha de aceite provocada por el vertido de un vehículo.

• No permanecer con el motor encendido dentro del garaje.

Actuación en caso de incendio en garaje

• Avisar al 112.

• Ataque al fuego en sus inicios. Si se presencia el inicio del fuego y éste no ha pasado de su fase inicial (todavía no hay extensión de humo), procurar vaciar un extintor sobre el mismo, o hacer uso de la BIE.

• Evacuación inmediata de la zona. No prolongar la estancia en el lugar más de lo recomendado. Si en los primeros segundos no es posible hacerse con el incendio, es preceptivo evacuar la zona ateniéndose a las señalizaciones que nos indiquen la vía de escape más rápida, dejando tras de sí cerradas todas las puertas que se vayan abriendo.

2.- Prevención en viviendas

• En viviendas con cocina de gas revisar que las rejillas de ventilación no se encuentren obstruidas.
Revisar asimismo que la llama del gas en los quemadores sea de color azul. En caso de tener una tonalidad naranja indica combustión incompleta con la consiguiente producción de monóxido de carbono (asesino silencioso). Avisar al servicio técnico para la revisión de la instalación.

En caso de escape y posterior acumulación de gas, no accionar ningún interruptor de la luz. En ocasiones se puede producir una pequeña chispa al accionar el interruptor con la suficiente energía de activación como para provocar una explosión repentina en caso de que la mezcla aire-gas sea la adecuada.
Evitar también cerrar puertas, pues el roce del picaporte puede producir alguna chispa que causaría las mismas consecuencias. Avisar inmediatamente al 112.
A ser posible, cortar la fuente de emisión de gas y ventilar con prudencia el local, y si se tienen dudas, esperar a la llegada de los equipos de emergencia.

• La cocina es el lugar de la casa con mayor acumulación de energía, y por tanto la zona más expuesta a incendios.
La campana extractora ha de limpiarse con regularidad para evitar la acumulación de grasa que ayudaría al inicio y la posterior propagación del incendio.
Nunca apagar un incendio de aceite en una sartén echando agua. Se producirá un efecto que extenderá el fuego. Lo conveniente es taparlo con una tapadera u otro material similar.

• No acumular basuras ni ropa en torno a enchufes o aparatos eléctricos. En caso de fallo eléctrico, una chispa podría iniciar un incendio ayudado por el material acumulado.

• En caso de salir de la vivienda, intentar dejar conectados los aparatos eléctricos indispensables (nevera).
Es altamente improbable que el funcionamiento normal de un pequeño aparato eléctrico (ordenador, humidificador, ventilador, etc.) derive en un incendio, pero las posibilidades existen, y si no es imprescindible que permanezcan encendidos, mejor desconectarlos en caso de ausencia.

• Los aparatos que permanezcan en carga (afeitadoras, depiladoras, cepillos de dientes eléctricos, teléfonos, etc.) es recomendable dejarlos sobre superficies no inflamables y a distancia prudencial de cualquier otro elemento inflamable (cortinas, muebles...).
Si los aparatos se dejan en carga durante la noche, es recomendable situarlos alejados de elementos inflamables (muebles, toallas, cortinas, etc.) con la puerta de la estancia cerrada.

• Los aerosoles (lacas, insecticidas, etc.) no deben dejarse junto a elementos que produzcan calor, tales como aparatos en carga u otras fuentes de calor. Hay casos documentados de explosiones de aerosoles con derribo de paramentos verticales y horizontales de Pladur y escayola por esta circunstancia.

• En caso de acumular productos químicos (debajo del fregadero, por ejemplo), revisar que los recipientes se encuentren bien cerrados y en perfecto estado. La mezcla de algunos productos químicos puede provocar reacciones exotérmicas y derivar en incendio o explosión.

• Al salir de la vivienda, es conveniente dejar las puertas de cada habitación cerradas. En caso de producirse un incendio en alguna de ellas, la propagación del mismo se retardaría, dando tiempo a la llegada de los servicios de emergencia.

Actuación en caso de incendio en viviendas

• Llamar al 112.

• No correr riesgos innecesarios. Aunque el fuego sea de reducidas dimensiones y se haya estado presente en los inicios del mismo, puede ser altamente peligroso tratar de extinguirlo. La primera reacción nos llevará a intentar apagarlo, pero conlleva sus riesgos y las consecuencias pueden ser mayores en cuanto a la pérdida de la propia vida se refiere. El sentido común debe dirigirnos en este caso. Un fuego con llama de 30 cms, en sus inicios, si se tiene algún medio extintor, puede ser relativamente sencillo de extinguir, pero es importante no correr riesgos innecesarios. Lo material se repone, la vida no.

• Abandonar el recinto y cerrar todas las puertas detrás de nosotros.

• Si la vía de escape a la calle está libre de humos, salir al hueco de escalera cerrando la puerta de la vivienda y llevándonos las llaves con nosotros. Los bomberos las van a necesitar para acceder a la vivienda.

• Si la vía de escape se encuentra anegada por humo, NUNCA atravesarlo. Casi todas las víctimas de incendios fallecen por asfixia.
En este caso, acudir al punto más alejado del incendio dentro de la casa cerrando todas las puertas detrás de nosotros. Hacernos visibles desde el exterior pidiendo ayuda a través de una ventana.

• Si el fuego progresara hasta nosotros y nos dejara atrapados en la ventana, como medida de protección podríamos hacer uso de varias mantas, una encima de otra, procurando empapar con agua la manta de la última capa. Un tejido húmedo transmite mucho mejor el calor, pero también retarda el proceso de combustión. Al situar la manta húmeda en la última capa aumentamos las probabilidades de supervivencia. Desde luego, arrojarse por el vacío es una solución desesperada de consecuencias previsibles.

• Si el incendio ha inundado todo el recinto de humo, moverse a ras de suelo dentro de la zona afectada. Entre el suelo y el humo hay una zona “respirable” y de temperatura notablemente inferior a la que se puede dar en la zona media o alta.

• No esconderse bajo la cama ni dentro de armarios. Es algo muy común en niños, y no solo no protege en caso de incendio sino que además dificulta la labor de rescate de los bomberos.

• En caso de poder abandonar el edificio, no hacerlo usando el ascensor. El hueco del ascensor es una vía de escape natural del humo, además de que el ascensor podría quedar inutilizado a mitad de recorrido como consecuencia del incendio y el corte de suministro eléctrico, con lo que eso supondría para sus ocupantes.

• Rezar, para el que sepa y crea. Mantener una actitud alejada del pánico en la medida de lo posible ayuda sobremanera para enfrentarse a situaciones límite.