lunes, 29 de enero de 2007

Esperanza Aguirre se ofrece a pagar 3.000 policías para Madrid


Tras numerosas peticiones para que se aumente el número de efectivos policiales, Esperanza Aguirre se ofrece a la Delegación del Gobierno para pagar los gastos que supondría la incorporación de 3.000 nuevos policías nacionales y guardias civiles para garantizar la seguridad en la región.

Hasta el momento, desde la administración central guardan silencio y siguen así el ejemplo de Constantino Méndez, anterior delegado del Gobierno, de despreciar las propuestas que en materia de seguridad hacen los dirigentes de la Comunidad de Madrid. Así, la actual delegada Soledad Mestre considera suficiente el número de policías destinados en la región y no cree necesaria la creación de una policía autonómica a pesar del papel jugado por las denostadas BESCAM en las recientes luchas callejeras de Alcorcón.

Los mismos agentes que en 1.997 pero un millón más de habitantes.

Son los datos ofrecidos por sindicatos policiales mientras que desde el Gobierno central se esfuerzan por hacernos creer que se incrementa el número de agentes y que se aumenta el presupuesto destinado a seguridad en la Comunidad de Madrid.

El ratio de agentes por habitante es de los más bajos del país y debemos tener en cuenta que en nuestra comunidad se comete una de cada tres infracciones penales. A pesar de las nuevas incorporaciones no podemos dejar de denunciar que el número de bajas es cada vez mayor, los agentes en cuanto tienen oportunidad, dejan Madrid para buscar destinos más tranquilos y donde la carestía de la vida no les afecte tanto, por eso desde los sindicatos policiales se reclama con insistencia el plus de capitalidad y paliar así en lo posible este problema. Mientras, las anunciadas subidas de sueldo (alrededor del 6%) no hacen más que agrandar las diferencias salariales con otras cuerpor de policía como la Ertzaina y los Mossos d'Esquadra, que tienen prevista una subida del 8 al 10% para este año.

Por lo tanto, y a la espera de la contestación por parte del Gobierno, no está mal que de nuevo Esperanza Aguirre se ofrezca para encarar un problema que nos afecta a todos. Por una vez, antes de que sea demasiado tarde, podrían hacer caso a una de sus propuestas y dejar de impedir sus iniciativas.

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