martes, 2 de diciembre de 2008

Problemas en la Ciudad de la Justicia

Alejandro Zaera-Polo renuncia a su edificio por "falta de financiación"



Según publica hoy El País, el arquitecto Alejandro Zaera-Polo, ha dicho que se va del Campus de la Justicia.


Ha decidido que renuncia a la autoría de su edificio, el destinado al Instituto de Medicina Legal, y a la dirección facultativa de la obra, ya en construcción y que debía ser la primera en terminarse, a finales del año próximo. Zaera Polo se va, asegura, por un presupuesto insuficiente y por los "agravios comparativos".

Según palabras del arquitecto, "Nos vemos obligados a renunciar tanto a la dirección facultativa como a la autoría del edificio, y queremos desligar nuestro nombre de este proyecto y de la Ciudad de la Justicia de Madrid".


Según Zaera-Polo,

"Había mucha premura para conseguir arrancar y presentamos el proyecto original, aun a sabiendas de que necesitaría modificaciones". "Se acordó con el anterior consejero de Justicia, Alfredo Prada, que estaría sujeto a modificaciones posteriores"

Según la Comunidad de Madrid,

"Cada uno presentó su proyecto a un concurso público con un precio de licitación (una intención de coste) y eso es lo que se aprueba; se puede hacer algún incremento sobre ese precio, pero nunca del 53% sobre el presupuesto que quiere Zaera-Polo"

Para Zaera-Polo,

"Novecientos sesenta y siete euros por metro cuadrado no es el precio de un edificio singular, máxime si, como este, tiene que tener cámaras frigoríficas y salas asépticas. Yo entiendo que haya que ajustar los precios pero que se haga de una manera equitativa y no con estos agravios comparativos" (Los edificios de Norman Foster tendrán unos 2.000 euros por metro cuadrado)

Para la Comunidad de Madrid,

"Este caso es especial, porque somos nosotros quienes hemos elegido a Norman Foster para este proyecto, por ser quien es, no ha habido concurso público, por tanto, no es comparable, es un arquitecto más prestigioso y por esa razón su proyecto tendrá una dotación sensiblemente superior al resto"


El edificio había empezado a construirse el 7 de noviembre del año pasado y pretendía estar terminado a finales de 2009.

Desde mi punto de vista (agravios comparativos aparte), la Comunidad de Madrid ha obrado correctamente al no admitir ese incremento del 53%, y no querrá que vuelva a repetirse otro caso como el de Navarro en los Teatros del Canal, y menos aquí que supondría incrementar los presupuestos del resto de los edificios de la Ciudad de la Justicia.

El arquitecto se presentó a un concurso, conocía las condiciones, y ahora no puede querer cambiarlas cuando la obra está a medias.

¿Será un caso aislado, o el problema se repetirá en el resto de los edificios?

1 comentario :

  1. ¿Qué pasa con el edificio? Pues que se queda muerto de risa, como el resto de la ciudad de la justicia.

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